Decidnos, ¿quién mató al conde? Néstor Luján
Editorial: Plaza & Janés 1ª edición 1987
Cartoné editorial ilustrada. 21x13 centímetros. 236 páginas. Estado de conservación: ligeros roces en cantos, libro con señales normales de uso.
En la calle mayor de Madrid, fue muerto en atentado el Conde de Villamediana. Un virotazo que le atravesó el pecho, o una estocada, que el asunto aparece dudoso, acabó con la vida de un presunto Tenorio español.
El argumento de esta novela, evidentemente, gira en torno a la vida y asesinato del segundo Conde de Villamediana, Juan de Tassis (Lisboa 1582 – Madrid 1622) y a sus consecuencias posteriores. Pero ¿por qué fue tan importante el asesinato de este noble dentro de la Historia de España? Tal vez porque con el paso de los años se convirtió en un misterio dentro de todos los misterios que llenaron el sueño del Imperio Universal.
No parece que haya nada raro para desearle la muerte. Títulos, tierras, buena planta, amistades poderosas… todo le va bien. Pero la causa de su desastrado final hay que buscarlo más allá de la carcasa de su buena estrella, justamente en las entretelas de su carácter y destino. Pues parece ser que detrás de su brillo y oro Juan de Tassis, segundo Conde de Villamediana, era un hombre agresivo, directo y temerario, al cual le encantaban las mujeres, fueran estas nobles, tudescas o cantoneras, que no dudaba en jugarse un válgame Dios con los naipes de la desencuadernada, alancear toros con caballos jerezanos, veloces y finos como el viento, y sobre todo, en escribir poemas satíricos que hacían enrojecer a todo el mundo siendo diana de estos dardos cualquiera, desde la más noble dama hasta el más rijoso inquisidor, martillo y chusco de herejes. Así que poco a poco se puede ver como nuestro personaje empezaba a acumular odios.
Era un secreto a voces. Todo el mundo sabía que iba a pasar pero nadie hizo nada. Era como si una tormenta eléctrica se avecinara y todos callaran y se escondieran detrás de los postigos de las ventanas mientras que el futuro finado era el único desconocedor de su propia muerte. Ocurrió un 21 de Agosto de 1622 y todavía hoy sigue siendo uno de los grandes enigmas de la Historia de España. ¿Quién fue? ¿En qué y a quién benefició el cruel asesinato a sangre fría de Juan de Tassis, segundo Conde de Villamediana? Muchos son los interrogantes que a día de hoy, siglos después, se siguen investigando a la luz de nuevos legajos sacados a la luz de las más recónditas bodegas de los archivos reales. Unos apuntan a ajustes de cuentas y faldas, otros a pecados nefandos, mientras que la gran mayoría ponen la diana de la culpabilidad en las altas esferas de coronadas testas. Es curioso, pero parece que en el Madrid de los Austrias, con sus calles embarradas de lluvia y escasa iluminación nocturna, al igual que un poblachón de campo, era muy dado a esos tipos de crímenes, como por ejemplo el del secretario de Juan de Austria, Juan de Escobedo… pero éste en concreto tuvo algo especial, algo morboso y esperado, pues parecía que mientras se taladraba el cuerpo del Conde de Villamediana, la ciudad aguantara la respiración esperando haberse librado del problemático noble. Se han escrito libros, buena copia de ellos, sobre el tema, desde ensayos hasta poemas, y desde novelas hasta obrillas de teatro, aunque, a mi modo de ver, la obra que les presento a continuación Decidnos, ¿quién mató al Conde? del polígrafo Néstor Lujan, Premio Internacional de Novela en 1987